Por W. John Walsh
¿La práctica del bautismo por los muertos es una forma de necromancia? Primero, definamos la necromancia. El diccionario indica:
La necromancia, n. conjuración de los espíritus de los muertos para propósitos mágicos revelando el futuro o influenciando el curso de los acontecimientos (Merriam Webster's Collegiate Dictionary, Tenth Edition)
Necromancia (del griego necrós, ‘cadáver’, y manteía, ‘adivinación’), una de las artes adivinatorias por la que se evoca a los muertos es para obtener de ellos revelaciones sobre el futuro. También denominada nigromancia (alteración por el influjo del latín niger, ‘negro’, que proviene de ‘magia negra’), en un sentido más amplio se suele aplicar como sinónimo de magia, encanto o conjuro. Cabe distinguirla de la práctica atávica de realizar sacrificios humanos con fines adivinatorios en muchas religiones antiguas.
Esta descripción de ningún modo corresponde a la práctica de Los Santos de Los Últimos Días del bautismo por los muertos. Primero, los Santos Últimos Días son inculcados a evitar cualquier forma de espiritismo [comunicación con los muertos]. No conjuramos, invocamos, o tratamos de comunicarnos con los muertos en cualquier forma, mucho menos rogamos su colaboración en revelar o en influenciar el futuro.
Alguien acusando a los Los Santos de Los Últimos Días con necromancia simplemente hace una mala representación evidente.
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